Enfermedad de Ménière
¿Qué es la enfermedad de Ménière?
La enfermedad de Ménière es un trastorno en el oído interno que provoca episodios de pérdida de equilibrio y de audición. Generalmente, afecta a un solo un solo oído y se presenta a cualquier edad, pero sobre todo en adultos de 40 a 60 años. Es una patología crónica que se manifiesta en crisis o episodios esporádicos y espontáneos, los cuales varían según cada caso. Los mismos, pueden durar desde minutos a unas hora con síntomas que van desde fuertes mareos, vértigo, zumbidos en los oidos y pérdida de la audición de manera temporal. Si bien no tiene cura, la detección a tiempo y el tratamiento adecuado pueden ayudar a reducir su padecimiento.
En el mundo se calcula que 190 de cada 100 mil personas sufren este síndrome, en su mayoría suelen ser mujeres. En Argentina se cree que por año se diagnostican entre 4 mil y 8 mil nuevos casos de Ménière.
Causas
Las causas están asociadas a la acumulacion de líquido en el oído interno, donde están los receptores del equilibrio. El líquido (endolinfático) es el responsable de provocar los síntomas al interferir con las señales de equilibrio y audición normales que van del oído al cerebro.
Las razones por las que sucede la acumulación no están esclarecidas, pero puede ser producida por una respuesta inmune anormal, infecciones por virus, alergias, reacciones autoinmunes, un drenaje inapropiado del líquido o predisposición genética.
Otras causas:
También se la vincula directamente con el estrés y a una vida laboral muy agitada. Como no se ha identificado una sola causa, existe la posibilidad de que la patología sea un resultado de la combinación de varios de los factores mencionados.
Síntomas
Los episodios suelen ser distintos en cada caso, pero se puede dar una combinación de estos síntomas:
Vértigo
Comienza de manera repentina y sin aviso, es la sensación de que todo da vueltas y los objetos giran. Suele persistir durante minutos o varias horas, pero no más de un día. Si es un episodio intenso puede causar vómitos y náuseas.
Zumbidos en los oidos
Zumbidos en los oidos. Médicamente llamado Acúfeno o Tinnitus.
Presión, sensación de oídos tapados
Sensación de congestión auditiva en el oído afectado.
Disminución de la audición
La capacidad de oír aparece y desaparece al principio de la enfermedad, pero con el paso del tiempo se puede perder la capacidad auditiva de forma permanente.
Primeros síntomas
Cualquiera puede ser el síntoma iniciador, puede comenzar por la sensación de un oído tapado, de un zumbido, o una disminución auditiva. Los zumbidos suelen aumentar cuando está por desencadenarse el vértigo el cual varía pudiendo ser leve en muchos casos, con inestabilidad y mareos, o intensos con sensación de que todo gira. Los ataques pueden aparecer en cualquier momento del día o de la noche durando entre unos minutos, horas o a veces días. El nistagmo, o movimiento repentino y acelerado de los ojos, es otro síntoma que puede aparecer en el tránsito de la enfermedad.
Diagnóstico
El diagnóstico no se enfoca en una sola prueba definitiva, sino que se basa en la historia médica de cada persona y en la persistencia de algunos de estos tres síntomas:
- Dos o más episodios de vértigo de 20 minutos como mínimos.
- Perdida de la audición confirmada por una audiometría.
- Zumbidos o sensación de presión en el oído.
Entre los estudios para su diagnóstico, puede requerirse una resonancia magnética o tomografía computada del sistema nervioso para descartar otras enfermedades. También una exploración otorrinolaringológica de oídos, fosas nasales, cavidad oral y laringe. En este mismo sentido, el estudio de nistagmo (movimiento del ojo) para analizar las conexiones existentes en el cerebro entre el sistema ocular y el auditivo, puede ayudar a diagnosticar de forma eficaz.
Tratamientos
Si bien Ménière es una enfermedad crónica, que no tiene cura, un tratamiento adecuado puede ayudar a convivir con la misma, a reducir los síntomas y las secuelas. Existen medicamentos para minimizar los episodios y estirar el tiempo entre crisis y crisis. Un diagnóstico acertado logrará que los síntomas sean más leves. Debe evitarse siempre la automedicación.
Tratamiento de contención
En los momentos de crisis se administran antihistamínicos o ansiolíticos para el vértigo y para las nauseas pueden recetarse antieméticos. Es recomendable hacer reposo si hay mareos, e hidratarse en caso de tener vómitos.
Tratamiento de sostén
El tratamiento suele ir acompañado de la ingesta de diuréticos para eliminar del cuerpo los excedentes de líquidos y una dieta baja en sal, en alcohol, tabaco y cafeína. Los acompañamientos psicológicos también son adecuados para calmar el estrés. Una serie de cuidados personales y cambios de hábitos le ayudará a transitar mejor los episodios y a reducir el daño producido con cada crisis. Solo en pocos casos se recurre a la cirugía.
Medicina alternativa
Si bien no hay evidencias sobre la eficacia de estas terapias, en caso de recurrir a tratamientos alternativos es necesario informarle a su médico ya que pueden afectar la evolución del tratamiento convencional.
Complicaciones
Las complicaciones suelen darse con los episodios espontáneos de vértigo que interrumpen causando estrés y cansancio. Asimismo, las pérdidas del equilibrio aumentan el riesgo de accidentes y caídas. Muchas veces, el vértigo puede causar la incapacitación del paciente para las tareas cotidianas o laborales.
¿Cuándo consultar al médico?
Si tienes alguno de estos síntomas, es importante consultar de forma temprana al médico, porque un diagnóstico a tiempo y un tratamiento adecuado puede lograr adquirir una mejor calidad de vida mientras se transita la enfermedad. Además, estos problemas pueden ser producto de otra patología. Es recomendable concurrir a un otorrinolaringólogo para no demorar el diagnóstico y evitar que el daño sea mayor.
Según estadísticas se estima que la recuperación es importante y la mejoría puede alcanzar entre un 40 y un 70% a partir de los distintos tratamientos. Para preservar la audición es importante una consulta médica a tiempo.
Enfermedad de Ménière y acúfeno
Los acúfenos o tinnitus son zumbidos y percepción de sonidos cuando no hay ruido real presente. Se puede sentir en un oído o en algún lugar de la cabeza. Los más frecuentes suelen ser los de tono agudo. Si persisten pueden alterar el sueño e interferir con la concentración aumentando la irritabilidad del paciente. Los ruidos fuertes y el estrés puede aumentar su padecimiento. La terapia notch o sonora es recomendada para reducir el volumen y la percepción de los ruidos en los oídos (acúfenos).
Audiometría
La audiometría es una prueba médica que evalúa el funcionamiento del sistema auditivo y la forma de detectar los sonidos de diferentes volúmenes y tonos. También se enfoca en comprobar si es posible distinguir palabras que suenan parecidas. La dificultad para oír frecuencias bajas o combinación de bajas y altas es una característica de las personas con Ménière. Este es uno de los análisis indicados para un diagnóstico correspondiente de Ménière.
Consecuencias
Con el paso del tiempo se pierde la audición del oído afectado ya que los efectos de las crisis son acumulativos dejando secuelas sensoriales significativas. En ningún caso Ménière es mortal.
Los síntomas de Ménière pueden impactar fuertemente sobre la vida de las personas trayendo problemas de ansiedad, agorafobia, depresión, ataques de pánico e hiperventilación, por eso es recomendable el acompañamiento psicológico en estos casos.
¿Cuánto dura la patología?
La enfermedad de Meniere puede acompañar al paciente durante el resto de su vida, o desaparecer al tiempo con el tratamiento adecuado. La duración depende de cada caso y de su diagnóstico temprano.
Las crisis por vértigo pueden durar unos minutos o varias horas, dejando sensación de inestabilidad por varios días. Con el paso del tiempo, los episodios pueden volverse más leves.
Nistagmo
Las personas con problemas en el oído interno pueden desarrollar nistagmo temporario, una patología ocular que causa un movimiento rápido, de lado a lado, de los ojos que no puede controlarse. Puede ser hacia arriba y hacia abajo, en algunos casos o de forma circular. Variando entre rápido y lento, ocurre generalmente en ambos ojos. El nistagmo está estrechamente relacionado con los mareos causados por vértigo. Para diagnosticar este complejo proceso se realiza un estudio llamado video-nistagmografía.